La asimetría mamaria es natural en la mujer, salvo cuando se convierte en un obstáculo para sentirse bien consigo misma. Cada pecho es único, diferente, aunque la mayoría de las veces esta variación en tamaño o forma entre ambas mamas apenas es perceptible a primera vista, por lo que pasa desapercibida. El problema viene cuando estas diferencias entre pechos son tan ostensibles y acusadas que suponen un impacto negativo en la calidad de vida de la mujer. Es en ese momento cuando está indicada una corrección de la asimetría de mama. Las pacientes nos comentan en consulta cómo este problema les hace sentirse cohibidas, diferentes, con dificultades para encontrar ropa, como sujetadores o trajes de baño, que disimulen su problema, y con serios contratiempos en las relaciones de pareja.
La corrección de pechos asimétricos puede hacerse de muy diverso modo, atendiendo a la gravedad y características del problema. Podemos encontrarnos desde la sencillez de simplemente aumentar una mama para igualarla con su contraria, hasta combinarlo con elevación mamaria, reducción mamaria, o realizar una compleja cirugía mamaria reconstructiva para que el resultado muestre dos pechos iguales. No requiere el mismo tratamiento una leve pero perceptible asimetría que un pecho extremadamente asimétrico.
Para solventarlo, en algunos casos, la cirugía puede realizarse solo en un pecho, en otros casos será necesaria en ambos, en diferentes grados. Lo que si es destacable es el instrumento valioso que suponen los implantes mamarios para corregir la asimetría mamaria, ya que son clave para nivelar el volumen de ambos pechos, mediante una planificación exhaustiva de la asimetría y el cálculo exacto de las dimensiones que debe tener el implante.
Os mostramos este caso de corrección de asimetría mamaria, complicado con mamas tuberosas y ptosis en una mama (caída mamaria). El Dr Emilio Cabrera realizó mastopexia circumareolar con colocación de implante anatómico de diferente volumen en posición subpectoral. Resultado al año de la cirugía.